"Por La Juventud ".

viernes 2 de julio de 2010


1ra. Dama y Consul dominicano en Miami . .

Hace unos días, tuvimos en Miami, el privilegio de ser parte de uno de los actos más hermosos y emotivos que recuerde la comunidad dominicana del sur de la Florida.

Ochenta y seis ( 86 ) jóvenes de origen dominicano, recibieron sus certificados como participantes en el taller para jóvenes lideres que realiza en todo el territorio nacional y en las comunidades dominicanas del exterior, el Despacho de la Primera Dama de la República Dominicana.

Luego de cuatro semanas de intenso trabajo, estos muchachos que sacrificaron nada más y nada menos que los sábados y domingos para estar temprano en las instalaciones del Miami Dade College, llenos de amor, de entusiasmo, de deseo de superación y una actitud positiva que los impulsa a ser parte de este alumbramiento del futuro, de este encuentro con los más sanos valores, dispuestos a honrar y mejorar las relaciones que le vinculan a su entorno, a sus familias, a sus amigos, a sus tradiciones culturales heredadas de unos padres que, en algún momento, abandonaron sus pueblos y campos en la Republica Dominicana, para venir en busca de nuevas alternativas y para mejorar sus condiciones materiales de existencia, pero que siempre llevan su patria en el corazón.

Es imperativo para mi, resaltar el valor extraordinario de este tipo de programas y como impactan positivamente las comunidades. Como son un terreno abonado para los milagros, para que las potencialidades de nuestros muchachos y muchachas se desarrollen, se impulsen, florezcan y tomen conciencia de cuanto pueden, si lo desea, hacer cons sus jóvenes vidas.

En este caso fue, afortunadamente, la comunidad dominicana de Miami, la que pudo disfrutar de un curso que, más que una experiencia académica, fue una experiencia de vida.

Que bueno que fueron nuestros jóvenes, esos que vienen de “una media isla situada en el mismo trayecto del sol” y que esperan convivir bajo el cálido sol floridiano y echar mano a las oportunidades que esperan encontrar en el más hispano de los territorios estadounidense, el sur de la Florida, los que pudieron disfrutar de un curso donde poner de manifiesto sus capacidades de líderes, donde pudieron identificar todas las bendiciones con que fueron dotados por el Arquitecto de la Perfección.

Definitivamente, que la Dra. Cedeño de Fernández, a quien el tiempo parece rendirle cada día más, se ha consagrado como la gran revelación del accionar social en la Republica Dominicana. Los diversos programas y proyectos ejecutados por su despacho, en los 6 años que le ha tocado dirigirlo, han sido de enorme provecho y es una demostración palpable de que cuando se quiere trabajar y hacer cosas buenas por su país…. se consigue. Sólo hay que proponérselo, dedicarse y hacer de la vocación de servicio un sacerdocio. Por eso es que, hoy por hoy, Doña Margarita, tiene ganado en espacio en el corazón de los dominicanos y las dominicanas.